Es posible que estemos preocupados por cómo es que podremos cumplir nuestras metas a lo largo de nuestras vidas pero, ¿qué pasa si la vida nos tiene preparado un futuro diferente al que planeamos? Podremos frustrarnos pensando que lo que planeamos era lo mejor para nosotros y que seremos unas personas amargadas por no haber conseguido lo que queríamos. Pero, también podemos encontrar el lado positivo de los imprevistos que nos trae la vida y de esta forma facilitar la manera en la que nos adaptamos a las situaciones, esto se vería reflejado en la forma en la que tomamos las dificultades que se nos presentan. Estas, son imposibles de evitar, la diferencia está en la forma en la que las afrontamos. Finalmente si decidimos dejar nuestros planes como simples “planes” podremos llegar a la vejez con una mejor capacidad de adaptarnos a lo que la vida nos presente.Cecilia Aguilar Escobar
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